Comer semillas de chía todos los días puede fortalecer tu salud digestiva. Las semillas de chía son de color marrón oscuro o negro y están rellenas de nutrientes esenciales, como calcio, manganeso y fósforo. Estas semillas pueden comerse enteras o molidas en forma de harina. Como son insípidas, pueden ponerse en casi cualquier comida o añadirse a un batido. Uno de los mayores beneficios de añadir semillas de chía a tu dieta es el alto contenido en fibra. Una ración de 1 onza de semillas de chía contiene 11 gramos de fibra, lo que es un 25 % de la fibra que un adulto debe consumir al día. Aumentar tu ingesta de fibra ayuda a tener unos movimientos de vientre regulares. Comer semillas de chía también ayuda a ralentizar la digestión. Esto sirve para hacerte sentir lleno más tiempo. Cuando te sientes lleno, comes menos, lo que puede ayudar a que pierdas peso. La cubierta gelatinosa de las semillas de chía también te ayuda a estabilizar el azúcar en la sangre. Añadir se...
Y todo lo que se te pueda ocurrir